ESCUELA/FACULTAD DE INGENIERÍA
El Real Tribunal de Minería (1776) se propuso organizar tan importante rama de la economía novohispana, incluyendo “la educación y enseñanza de la juventud destinada a las Minas”. El colegio o seminario que proveyó a tal objeto a partir de 1792, iba a convertirse en una de las principales instituciones promotoras de la ciencia en el país, a pesar del colapso de la actividad minera que significó la guerra de Independencia y el desorden administrativo subsiguiente.
En 1811 ocupó el edificio neoclásico, obra de Manuel Tolsá, que se conocerá como Palacio de Minería; se fueron abriendo paso los estudios de topografía, mecánica, física y química, al margen de su uso en la extracción de metales, y hacia 1833 la escuela era el núcleo del Establecimiento de Ciencias Físicas y Matemáticas que manejaba el Ministerio de Guerra. Con la reordenación educativa de 1843 aparece por primera vez el título profesional de ingeniero (de minas), junto con carreras como agrimensor y geógrafo, en el Colegio de Minería. La Ley de Instrucción Pública de 1867 lo convierte en Escuela Especial de Ingenieros, que también ofrecía las ingenierías civil y mecánica, la primera de las cuales crecería en importancia conforme se desarrollaba la obra pública y de infraestructura del Porfiriato; en 1883 se denomina Escuela Nacional de Ingeniería, que se incorpora en 1910 a la Universidad Nacional.
Desde 1917 también se apreció la necesidad de abrir un área de enseñanza sobre obtención y aprovechamiento del petróleo, pero sólo hasta 1929 aparece la carrera de ingeniero petrolero. En el mismo ámbito encontraría sus antecedentes la actual Facultad de Ciencias, en funciones desde 1939.
Al momento del traslado a Ciudad Universitaria, se podían estudiar las carreras de ingenieros topógrafo, geodesta, civil, de minas y metalurgista, mecánico electricista, petrolero y geólogo, y a partir de 1957 se impartieron maestrías y cursos especializados, para lo cual se creó la División de Estudios Superiores, que en 1959 dio a la Escuela el carácter de Facultad de Ingeniería.
Este fondo se compuso con materiales transferidos por el Archivo General de la UNAM —en expedientes sin distinción de materia ni tipología, principalmente en los años 1969, 1974 y 1976— y ofrece testimonios importantes de la vida académica y administrativa del plantel. La documentación que no se encontraba encuadernada o en libros de registro (de inscripciones, asistencia, calificaciones y actas de exámenes, entre otros) se clasificó en cuatro secciones, con las siguientes series:
1. Dirección
-Consejo Universitario
-correspondencia
-informes y reglamentos
2. Administración
-contabilidad
-personal
-solicitudes Externas
3. Académica
-actos culturales
-biblioteca
-contenido de exámenes
-convenciones, exposiciones y estudios
-planes y programas de estudio
-publicaciones
4. Asuntos escolares
-apertura de cursos
-becas
-calificaciones y exámenes
-listas de asistencias e inscripción
-prácticas de alumnos
-organización
-premios de alumnos
-sociedades y asociaciones
El acervo completo se puede consultar en microfilme.